Se que estas cansada de tener montones de ropa sucia acumulada, de cambiar pañales, de no tener tiempo para ducharte tranquila y de orinar con la puerta abierta para observar que tu bebé esté bien.
Se que estas cansada de estar preocupada, de preguntarte si está creciendo suficiente, si está respirando, si está durmiendo bien, si es normal que llore, si tu relación de pareja sobrevivirá, si esto de ser mamá lo estás haciendo bien.
Se que estas cansada de tener tus brazos constantemente ocupados cargando a tu bebé, de sentir que necesitas ayuda pero nadie se ofrece a brindarla, de solo hablar de bebés, de recibir críticas frecuentes acerca de lo que haces o no haces, de no tener la compañía de otros adultos, de que solo te vean como “la mamá”… se que estas cansada de estar cansada.
También se que en este momento sientes que tu vida es un caos… sé que estás abrumada y exhausta… sé que piensas que este caos durará para siempre; que tu vida social, de pareja, laboral no regresará jamás; que no volverás a dormir la noche seguida, que tu bebé será siempre bebé y te necesitará siempre…
Sé que estas viviendo una montaña rusa de emociones…
Sé que los días pasan despacio pero los años rápido…que muy pronto ese pequeño bebé crecerá y podrá hacer todo por sus propios medios…que la teta ya no lo calmará, que tu cuerpo ya no será su refugio, que tus brazos ya no serán su lugar preferido en el mundo…
Sé que en el futuro recordarás estos primeros meses y te reirás del caos que les rodeaba, sé, inclusive, que todo lo que hoy ves como grandes retos se irá de tu memoria, y lo único que recordarás, serán esos momentos maravillosos de amor infinito, magia y conexión.
Sé que lo que estás viviendo es único e irrepetible… y sé que no durará para siempre…
Disfruta del caos, ya pronto las aguas se calmarán.
